Conocemos el testimonio de James Mandela con motivo de la 109º Jornada Mundial del Migrante y Refugiado, la cual se celebrará en la Diócesis este sábado 23 de septiembre con una Eucaristía a las 20hrs en la parroquia de Nuestra Señora de los Dolores presidida por Monseñor José Rico Pavés, Obispo de Asidonia-Jerez.
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La Iglesia celebra el próximo 23 de septiembre la 109º Jornada Mundial del Migrante y Refugiado, por ello en cada Diócesis se dedicará especial atención a esta realidad de la sociedad, en la que la Iglesia pone su mano para acoger y amar al prójimo que tiene rostro de migrante o refugiado. En este caso, esta labor en nuestra Diócesis la realiza la Delegación Diocesana de Migraciones, con su Delegada Diocesana al frente, María Dolores Martínez, quien prepara para esta jornada mundial una Eucaristía. Esta Santa Misa tendrá lugar el próximo 23 de septiembre a las 20hrs en la parroquia de Nuestra Señora de los Dolores presidida por Monseñor José Rico Pavés, Obispo de Asidonia-Jerez.
Por otro lado, como preparación para esta jornada, gracias a la Delegación Diocesana conocemos el testimonio de James Mandela, quien nos cuenta que tras fallecer su padre en Inglaterra tiene que abandonar a toda su familia en busca de un futuro mejor en Jerez de la Frontera. Asimismo, nos explica la difícil situación que vive en su llegada, ya que no conoce a nadie ni sabe donde ir. Pero todo cambia gracias a un encuentro con Cristo a través de los Cursillos de Cristiandad, que hace que su corazón se llene del amor de Dios, el cual es capaz de incluso en situaciones difíciles podamos seguir el camino que Él nos marca.
Una vez conocido a Cristo, James Mandela nos cuenta que empieza a vivir su fe en dos realidades de la Diócesis de Asidonia-Jerez. La primera de ellas es la Pastoral Penitenciaria, donde se encarga del ropero, es decir, de toda la labor de la ropa que necesiten los presos. La segunda es la Parroquia de Nuestra Señora de las Nieves, donde se lleva a cabo un encuentro de los Cursillos de Cristiandad, donde viven la Eucaristía y la Adoración Eucarística.
Por último, manda un mensaje a todos los migrantes que pasen por la misma situación que él, y este no es otro que conozcan a Cristo, porque aunque el camino puede estar lleno de dificultades con el Señor todo cambia.