Ejes principales de «Palabra de Vida» de Monseñor Rico Pavés : El Evangelio del domingo, recuerdo del 40 aniversario de la visita de Juan Pablo II a España y la campaña del «Día de la Iglesia Diocesana»
4 noviembre, 2022
Hay formas equivocadas de acercarse a Jesús. En no pocos pasajes de los Evangelios se nos presentan personas que acuden al encuentro de Cristo con intenciones torcidas. El Señor nunca rechaza a nadie. En el Evangelio de este Domingo un grupo de saduceos, que niegan la resurrección, se acercan a Jesús para intentar cazarlo con una pregunta capciosa. El caso inventado de la mujer de los siete maridos que fallecen es planteado por los saduceos a Jesús no con el deseo limpio de aclarar dudas legítimas sino con la pretensión sucia de ridiculizar una creencia y poner en apuros al Señor. Jesucristo no desaprovecha la ocasión y corrige con paciente misericordia a quienes le interpelan.
El engaño juega con los sentimientos y se disfraza de inteligencia. En el caso que proponen los saduceos parece interesar la cuestión ineludible del alcance del amor que se profesan los esposos. Su comprensión del matrimonio, sin embargo, es sólo carnal. Con su respuesta, Jesús desvela que el amor que sostiene a los esposos en este mundo no puede fundarse sólo en el afecto de la carne. Jesús no afirma que los esposos, tras la resurrección, dejarán de amarse, sino que el deseo carnal desaparecerá. Los que sean dignos de la resurrección –dice el Señor- no se casarán, pues ya no pueden morir. El deseo perecedero dejará paso definitivamente al amor inmortal.
Celebramos este fin de semana el Día de la Iglesia Diocesana: una oportunidad más que se nos ofrece para sabernos miembros activos de la Iglesia cercana en la que vivo, poner al servicio de los demás los dones y cualidades recibidos del Señor, y colaborar así en la tarea evangelizadora de la Iglesia. Se cumplen además cuarenta años de la primera visita del Papa San Juan Pablo II a España. La enseñanza que entonces nos regaló y el testimonio de su vida son un legado que nos sigue iluminando en el momento presente.
Para vencer la mediocridad que debilita nuestra vida de fe e impide que transmitamos a otros la alegría de creer, es necesario acudir al ejemplo e intercesión de los santos. Que San Juan Pablo II nos ayude a impulsar la nueva evangelización en nuestra Diócesis.
A todos los miembros de la familia diocesana que os dais a vosotros mismos y aportáis vuestra oración, tiempo, cualidades y apoyo económico, ¡gracias por tanto, de corazón!
+ José Rico Pavés
Obispo de Asidonia-Jerez
Sin Comentarios